En 1948 Carmen deja su Salamanca natal para ir a Madrid con la idea de hacer su tesis doctoral y dedicarse a la enseñanza. Allí vivirá toda su vida, entre sus casas en Madrid (primero la de su familia, en Duque de Sesto y en Alcalá y después la sita en Doctor Esquerdo cuando se casa) y El Boalo, una propiedad en la sierra madrileña que adquieren los padres de Carmen en 1960. De ahí dará saltos por medio mundo, Italia, Alemania, Argentina y sobre todo los Estados Unidos. Su vida se quiebra en 1985 cuando su hija Marta fallece.