BOLETIN DE LA ESTADISTICA MUNICIPAL DE BUHOOS insigne y grande Santuario de Santo Toribio, de Liébana, es uno de ellos que basta para ennoblecer, como de hecho la ennoblece, a toda una provincia entera. PIEZAS GRANDES DE ESTA REAL CASA Dejando por ahora un sinnúmero de cosas que había que decir, vengamos ya a tratar de lo material de la casa. Está situado el Monasterio, en el recinto breve que dan los altos peñascos que rodean la Villa, y el sitio que él ocupa, es muy cierto, es mucho mayor que la misma Villa: pudiéndose decir, que si fuera más llano y dilatado, campeara y luciera mucho más. Lo primero que se vé en todo este hermoso edificio es la Iglesia, muy grande y suntuosa, ricamente alhajada; pero sobre todo su Capilla mayor es de las más insignes de España, obra que debió su principio y perfección al M. R P. Fray Juan Manso, que fué Abad de esta Real Casa once veces. Fabricóla mucho después que estaba hecha la Iglesia. Entrase a ella por debajo de una muy alta torre, que está fundada sobre cuatro pilastrones, con artificio tanto," que parece que se erige en la misma clave en donde sin el menor estorbo puso un órgano muy grande y sonoro. El suelo de esta torre sirve de entierro a los monjes Dentro de esta Capilla mayor, a uno y otro lado del retablo mayor, trazó los sepulcros reales, levantando un majestuoso panteón, porque antes estaban a la puerta de la Iglesia; estilo de aquellos tiempos en que se tenían los antiguos por indignos de ocupar otros lugares en el templo. Cuando el Rey don Sancho el Bravo edificó la Capilla de Nuestra Señora, la edificó para que en ella descansasen los huesos de sus progenitores, como descansaron algunos años, hasta que el referido Abad los trasladó a los sepulcros que decimos que todos son de nogal, ricamente labrados, y para su mayor decencia se cubre cada tumba con un muy rico paño de brocado, donde están grabadas de oro las armas de cada uno. Es la obra de tanta magnificencia en arcos, frisos, pirámides, lazos y flores, que podía ser empresa de un Rey. Todo el pavimento de la Capilla es de piedra de mármol blanco y negro, y de lo mismo el pedestal del retablo, de los sepulcros reales y todo el presbiterio. De suerte, que allí todo está representando el poder y grandeza de los Reyes de Castilla, de León, de'Navarra y de [AragónHermoséalo mucho la grande y curiosa sillería, que la rodea con dos órdenes dé sillas, que en todas llegarán a ser doscientas Todo lo demás de la Iglesia está con la misma grandeza en retablos. Capillas y rejas, especialmente la de Nuestra Señora es como otra Iglesia, aparte por su grandeza y hermosura. La sacristía es otra pieza muy suntuosa, que siendo, como es, una Capilla cuadrada, está muy próxima a la mayor en el lado de la Epístola, que si metemos en ella el grande adorno de pinturas, y sobre todo de alhajas de oro y plata para el culto divino, como son cruces, candeleros, cálices, custodias, vinajeras, fuentes, poitapaces, y otras cosas a esta traza, dudo haya muchas que la excedan en España. De ornamentos ¡no quiero decir más, sino que hay uno tan rico que hizo la casa a su costa, que según hay noticia en ella, la tuvo de costa once mil ducados. Héle visto muchas veces y todas con la mayor admiración, porque verdaderamente la causa; pero por mayor riqueza tengo el gran número de reliquias que posee esta Real Casa, de las cuales no hago catálogo por no cansar Los claustros son magníficos, así los bajos como los altos, son todos ellos de rica piedra, en la cual supo el arte hacer y esculpir tantas maravillas cuantas son sus piedras. Son muy largos y altos y la anchura muy proporcionada. Hermoseólo mucho siendo la primera vez Abad de esta Real Casa el Reverendísimó P M Fray Juan de Cañas y Silva, adornando el de abajo con varias pinturas de la vida y milagros de San Iñigo, y el de arriba con el de nuestro Padre San Benito. Todas laá demás piezas de la casa son magnificas y hermosas: escaleras, librería, capítulo, refectorio y noviciado, con otras muchas que fuera largo de referir. La huerta de esta casa es primorosa en todo y por todo tendrá de cerca una legua, poblada de diferentes árboles y viñedo, y muchas diferencias de frutas. En ella hay tres ermitas bien edificadas y mey vistosas, dedicadas a San Benito, a San Toribio y a la Magdalena, adonde los monjes se recogen a rezar sus devociones. Pero en dónde embazan todos es, cuando ven tantos estanques, que todos tienen origen de una fuente tan copiosa que, cuando sale de la tierra^ echa un cuerno de buey de agua, y luego al principio hace un estanque tan grande de donde sale el agua por nueve caños, de donde se reparte a otos cuatro. En ellos hay tanta abundancia de hermosas truchas, que andan cruzando de unas partes a otras, que causan grande entretenimiento a a quien las mira. La abundancia áe agua es tanta, que luego qué sale de la huerta muelen cuatro molinos, y en fin, en ella Se ven tantas cosas juntas, varias y bellas, que cual- - 24